miércoles, 4 de diciembre de 2013

A estas alturas y la ley del hielo???

Cuando estaba en la secundaria... no... en la primaria, había un niño que me jalaba las trenzas que afanosamente mi mamá me hacía con mucho trabajos (porque no podía estar mucho tiempo en un solo lugar) cada mañana.

Como es lógico, le dejé de hablar, qué caso tenía hablarle a alguien que me halaba las trenzas!!! Y como NO tenía en realidad que hablarle porque habían unos 38 niños y niñas más pues que le dirigiera la palabra pues no tenía importancia.

En otra ocasión, una de tantas mañana también por la misma época, que me enojé con mi mamá (de seguro un lunes porque tenía ceremonia) y tenía que hablar frente a toda la escuela en el balcón (claro que nunca se escucha nada), pero el chiste es que la "muy digna de mi" hasta le voltié la cara a mi mamá =O y con los ojos llorosos (porque me sacó una fotografía) no le hablé ni le dirigí la palabra.

En la secundaria francamente no recuerdo sí lo hice, y sí estoy segura que alguna otra vez que terminé "del chongo" con mi mamá y/o con mi hermana no les hablé. PPPPPPPEEEEERRRROOOO un día aprendes que es una tontería dejar de hablarle a la gente, no resuelves nada! Ok, tuviste un problema, pero ya... resuelvelo y sigue con lo que estás haciendo y más cuando estás en el trabajo!!!!

A ver, les voy a dar una lección a los que no la sepan, es bien sencillito no confundas lo personal con lo laboral, no vale la pena, bajo ninguna circunstancia vale la pena, que bien si del trabajo pueden salir varias amistades pero... de no ser así ni para qué forzarlas.

Si te aprendes lo anterior, entonces no tienes detalles estúpidos como no hablarle a la gente con la que trabajas, y más cuando eres su jefe, o bien, diles simple y llanamente, no tengo ganas de hablar ahorita contigo, no trates de mostrar favoritismos que son francamente estúpidos, mucho menos contemplaciones condescendientes de "no nena", "eres buenísima en lo que haces", "tú sí me entiendes", etc... repito, eso funciona cuando tienes 15, no cuando estás en los 40, a estas alturas se ve ridículo.